Revisar la póliza de su seguro de vida es una acción que debe hacerse con cierta regularidad. Ese ejercicio de revisión es importante para determinar si su seguro es suficiente y de esa manera poder adecuarlo a sus necesidades del momento.
Especialmente si se producen cambios significativos en ámbitos familiares o laborales:
Familia
• Nacimiento de un hijo. La llegada de un nuevo integrante nos hace replantear muchas cosas. Hay otros gastos, otras obligaciones y el panorama cambia.
• Hijos que se van a la Universidad. Esto implica un alto costo, dependiendo del lugar y el país donde estudiará. En definitiva, un salto que hay que saber afrontar.
• Separación y divorcio. En estos casos es casi inevitable la revisión, ya que normalmente el cónyuge es el beneficiario. Pero además, implica -dependiendo de los términos de la ruptura- un impacto directo en los ingresos.
Trabajo
• Cambio de trabajo. El cambio de aires a nivel laboral siempre conlleva cierta dosis de incertidumbre.
• Conseguir un ascenso. Obtener un puesto superior representa también un mejor ingreso. Revisar la póliza y subir el monto le permitirá mantener a su familia el estilo de vida deseado y sin preocupaciones.
• Independizarse. Cortar lazos y emprender un proyecto propio es un paso importante y muchas veces necesario para seguir creciendo, pero tiene sus riesgos. Otro excelente momento para mejorar las condiciones de su póliza o complementar con otra, una para cada socio de la nueva empresa.
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